Julio César Chávez Jr. podría regresar al ring después tres años de estar alejado del boxeo en lo que se dice podría ser una función especial incluida en la pelea de Mike Tyson y Jake Paul.
Según los informes, Julio podría subir al ring el próximo 20 de julio de 2024 en el AT&T Stadium de Arlington, Texas, donde se llevará a cabo la pelea de Tyson y Paul, misma que será transmitida en vivo por Netflix.
El periodista Fernando Barbosa adelantó la participación del mexicano, sin dar detalles de quién podría ser su oponente. “Ya ha sido seleccionado y está esperando la confirmación de la Comisión de Texas”, reveló.
La noticia de su posible pelea se da después de que el hijo de la leyenda del boxeo Julio César Chávez iniciara el año con varios escándalos y una detención en Los Ángeles por posesión ilegal de un rifle de asalto, según informó en su momento TMZ.
El arresto y fichaje del boxeador, de 37 años, ocurrió después de que un fanático llamara a la policía preocupado por la seguridad de Chávez Jr. y por temor de que pusiera al vecindario en peligro.
Al llegar la policía, el campeón del ring le permitió pasar a su casa para inspeccionarla; sin embargo, los agentes encontraron un rifle de asalto ilegal, catalogado como una “pistola fantasma” imposible de rastrear.
Este es el último escándalo del pugilista y se produjo después de que acusara públicamente a su padre de querer matarlo y lo responsabilizara “si algo le llegara a pasar”.
Según TMZ, Jr. dijo que se le “acusa” de tener una enfermedad mental, y que su esposa Frida Chávez, se está aprovechando para quitarle todos sus bienes.
En tanto, dijo que es mentira que su padre lo apoya y lo cuida y recordó las veces que apaleaba a su madre y lo llamó “abusón”.
Chávez Jr. dijo: “Si algo me pasa es culpa de Frida y de mi papá. Me hacen como que estoy loco y ella gana en la corte y ella agarra el dinero y me hace ver como loco. Imagínense, para que haga algo la familia y me haga pasar como loco, entonces estoy diciendo antes de que pase la situación”.
Agregó sobre el apoyo de su padre: “Eso es una basura, como cuando golpeaba a mi mamá. ¡Es una basura! La hizo pedazos, la golpeaba, la humilló, está traumada, ya no puede hacer nada, quedó dañada para toda la vida por ese güey que me está dañando a mí. Pinc*he abusón que dice que me quiere ayudar a mí. Que mejor ayude a su mujer y a su hija”.
Las declaraciones de Jr. no han quedado allí, también acusó: “Me quieren matar. Me va a matar mi papá, mi papá me está matando, me quieren mandar gente para envenenarme. Han tratado de matarme. No quieren que llegue a la corte. Los van a meter al bote a todos”.
Antes de estos escándalos, Julio César Chávez Jr. fue retenido en un hospital psiquiátrico en Los Ángeles a finales del año pasado, después de que su esposa Frida Chávez reportara a emergencias de que el atleta había ingerido decenas de pastillas.
Frida le dijo a la policía que su esposo había tomado una gran cantidad de medicamentos “potentes y potencialmente peligrosos”, por lo que estaba preocupada y quería que los médicos lo examinaran para prevenir cualquier desgracia.
Tras el informe, se le prohibió a Chávez Jr. regresar a su casa y en cambio le pidieron ir a un centro psiquiátrico para recibir tratamiento.
Según la ley de California, un médico, la policía o funcionarios de primeros auxilios pueden enviar al paciente a recibir tratamiento si creen que representa “un peligro para los demás, para ellos mismos o está gravemente discapacitado”.
Los pacientes pueden ser retenidos hasta por 72 horas para su evaluación e intervención de crisis.
Tras estos escándalos de Jr., Julio César Chávez padre expresó su preocupación por su hijo y los problemas de adicción que tiene.
Él dijo en una entrevista: “Me da pena porque sus hijos son pequeños y no los está disfrutando. Me duele que se vaya a volver loco, que vaya a tener un accidente conduciendo a las 12-1 de la mañana a toda velocidad, que vaya a que le dé un infarto por todas las pastillas que toma”.
Durante su juventud, Julio César Chácez Jr. tuvo gran éxito como promesa del boxeo profesional, casi al mismo nivel que su padre; sin embargo, su carrera se vio manchada por múltiples escándalos de drogadicción, incluso sobre el ring.
En 2009, fue sancionado y se le quitó el triunfo de una pelea por dar positivo a furosemida, una sustancia de efecto diurético que ayuda a perder peso.
En 2012, Chávez dio positivo a un examen antidopaje que reveló marihuana en su organismo, por lo que se le pidió entrar a un centro de rehabilitación y pagar una multa.
El atleta ha dicho que su consumo de drogas y sustancias nocivas se agravó en 2012 después de perder la pelea contra Sergio ‘Maravilla’ Martínez en Las Vegas por decisión unánime. En el encuentro ambos pelearon el cinturón de peso mediano del Consejo Mundial de Boxeo.