Tim Baxter presidente de Samsung Electronics America reconoció que el 2016 fue “un año de retos” y afirmó que la empresa revelará muy pronto la causa detrás de las explosiones de sus teléfonos Galaxy Note 7 y que llevó al retiro de millones de unidades del mercado.
El retiro dejó al gigante corporativo en ridículo, por lo que, de acuerdo con el CEO han reflexionado y escuchado a expertos para entender que pasó y asegurarse que no vuelva a ocurrir.
Baxter no mencionó el otro problema que tuvieron en el área de electrodomésticos con el retiro de millones de lavadoras cuya tapa se separaba y ponía en riesgo a los usuarios, y de las cuales se retiraron 2.8 millones de unidades en Estados Unidos.
El retiro de los teléfonos en 2016 le costó a la empresa coreana 5300 millones de dólares en pérdidas.
El marco del CES en Las Vegas, no es típicamente en donde Samsung revela sus novedades, pero la presencia este año obedece a que están listos para pasar la página sobre el incendio de sus teléfonos y continuar dándole la competencia a sus rivales.