La generación del milenio enfrenta serios aumentos en los costos de vivienda en comparación con las generaciones pasadas.
Según información Business Insider, esta generación de jóvenes, entre las edades de 23 y 38 años, hoy en día están experimentando dificultades para arrendar o comprar un hogar propio.
Pero ¿por qué sucede esto?
El portal menciona que, en comparación con las generaciones de sus padres o abuelos, los millennials se enfrentan a altos costos de vida y deudas como las estudiantiles con las que cargan durante años.
De acuerdo con la organización Student Loan Hero, especializada en salud financiera y préstamos, el 69% de los universitarios estadounidenses en 2018, se graduaron con una deuda promedio de 29 mil 800 dólares más intereses.
En estadísticas generales, los estadounidenses deben más de 1.56 billones de dólares en préstamos estudiantiles, repartidos en más de 45 millones de prestatarios.
Estas deudas orillan a la generación a comprar diferentes tipos de hogares y en diferentes zonas, en comparación con sus padres y abuelos.
También están adquiriendo sus hogares en diferentes circunstancias, esperan más tiempo, compran antes del matrimonio o viven con sus padres hasta tener los suficientes ahorros.
Diferencias en el mercado de bienes raíces en décadas pasadas y ahora
Desde la década de 1980, los precios de vivienda se dispararon casi un 40%, superando los aumentos salariales que se han dado en el mismo periodo de tiempo.
El aumento promedio de una casa en la actualidad es 70% más alto que en la década de 1960, dejando un costo de los casi 300 mil dólares por casa, reporta Zillow.
En cuanto al alquiler, el informe resalta que el precio aumentó 46% durante los últimos 50 años. Los altos costos impiden el ahorro para la compra de una casa propia y desafía el enfoque de las rentas: más asequibles que una casa.
Millennials en busca de soluciones
The Wall Street Journal sugiere que, para evitar estos altos costos, los jóvenes optan por elegir residencia en suburbios alejados del trabajo y aceptan viajar más de una hora o dos cada día, dejando la inversión a los bajos costos de gasolina y ahorrar lo sobrante.
También están rompiendo con la tradición de un matrimonio joven para compartir el gasto de la compra, ahora los millennials ahorran todo lo posible para asegurar un futuro libre de deudas y por la posibilidad de evitar más aumentos.
A continuación te dejamos con otros datos sobre cómo enfrentan los millennials los cambios en el mercado de bienes raíces.