Vizio se metió en problemas con la FTC (Comisión Federal de Comercio) por sus siglas en inglés, esta semana y tendrá que pagar una multa de 2.2 millones de dólares para responder a los cargos de que monitorea los hábitos de los usuarios en más de 11 millones de aparatos, sin el consentimiento de sus dueños.
Esta práctica de los fabricantes de televisiones ha sido una queja de los usuarios por varios años, y en 2016 se presentó una demanda colectiva.
La demanda prohíbe a Vizio específicamente recolectar hábitos de los televidentes sin su permiso explícito.
El problema es que las televisiones de esta marca tienen mecanismo de rastreo encendidos por default, cuando la mayoría de los fabricantes los tienen apagados y trata de hacer mediante “trucos” que la gente los encienda. Sus modelos más recientes sin embargo tienen estos sistemas apagados.
La información que recolectan es bastante personal, por ejemplo, que programas ves, que sistema de cable usas, que clase de películas ves mediante stream o blu-ray, etc de acuerdo con la FTC.
Esta información se cruza luego con datos personales y económicos como sexo, edad, ingresos, estado civil, tamaño de la casa, educación y otros.