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Algunas parejas se mudan a una misma casa porque desean casarse, probar su vida antes del matrimonio o para compartir gastos y ahorrar un poco de dinero. Sin embargo, esta vida puede acabar con el amor y los ahorros si no se tiene una buena planeación.

En Estados Unidos se registró una cifra de 18 millones de adultos que viven con sus parejas sin estar casados, lo que implica un aumento del 29 por ciento, en comparación con 2007, de acuerdo con .

Aunque más personas se mudan con su pareja, la riqueza que acumulan es menor que en el pasado, pues compran muebles, obras de arte y automóviles, en lugar de acciones, propiedades u otros artículos que incrementen su patrimonio.

A la hora de iniciar un hogar en pareja es importante la honestidad y una conversación sincera sobre la situación financiera de cada uno. Expertos en finanzas personales recomiendan revelar las deudas de tarjetas de crédito, de préstamos o hipotecas para poder analizar bien la situación. También se debe declarar el salario real y los gastos mensuales.

Antes de firmar el contrato de renta o compra de una vivienda, se requiere un análisis de los gastos e ingresos mensuales, así como de la división de las responsabilidades financieras de una vida en pareja. Algunas personas acuerdan pagar la mitad de la renta o de los servicios. o que quien tiene el mayor salario, aporte más dinero.

También es importante hacer proyectos financieros a largo plazo, en vez de gastar demasiado en muebles o decoración. Los planes de retiro, la compra de acciones o bonos son una mejor inversión.

Lo más saludable que recomiendan los expertos es que las parejas mantengan sus finanzas separadas. Los gastos del hogar pueden seguir siendo compartidos, pero las cuentas bancarias y las inversiones deben hacerse de forma individual.

Consulta en la galería de arriba algunas señales que te podrían alertar que tu pareja no es tan estable económicamente como para que te mudes con ella.

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