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Comprar lo que está de oferta podría ser un desperdicio de dinero si lo que adquieres no es exactamente lo que necesitas y podrías terminar odiando tu compra
Uno de los grandes problemas cuando vas de shopping es comprar espontáneamente, caminar los pasillos de los malls y dejarse llevar por el encanto de aparadores y vitrinas que parecen susúrrate al oído: “cómprame, cómprame”.
Caminar por los malls y outlets por hora termina por agotar a cualquiera y una vez exhausto es probable que no pienses bien en lo que estas gastando tu dinero y reventando tus tarjetas de crédito, de acuerdo con Caroline Topperman, experta en moda y estilo de Style on the Side.
Los maniquíes perfectamente vestidos están ahí por una razón, afirma la experta, pueden darte una idea de un “outfit” pero también pueden resultar agobiantes, especialmente si te convences que deseas con toda el alma es prenda, pero esta no encaja en tu estilo de vida o va con nada que tengas en el guardarropa.
Ante ello, los expertos recomiendan ir de compras frescos, ya que hacerlo cansados los empuja a comprar lo primero que encuentres. Tampoco se debe hacer sin haber comido, pues con hambre todo te parecerá mal, son algunas de las reglas que todo comprador conoce.
Sin embargo, Topperman va más allá y nos comparte cinco reglas de oro que deberías tener en cuenta la próxima vez que vayas de shopping en Estados Unidos:
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