Un avión con unos 200 estadounidenses a bordo procedentes de la ciudad china de Wuhan, epicentro de la epidemia del nuevo coronavirus, aterrizó este miércoles en una base militar en Riverside, California, donde permanecerán alojados.
Fueron recibidos en la pista de la Base de la Reserva Aérea March Joint por vehículos de emergencia y tres autobuses, donde los esperaba el personal con trajes de protección frente a riesgo biológico.
El Departamento de Defensa aseguró que los evacuados serán enviados a hospitales locales si se sospecha que están infectados con el nuevo coronavirus.
La epidemia ya ha matado a más de 130 personas y se ha esparcido por el mundo desde que surgió por primera vez en un mercado de alimentos en Wuhan en diciembre.
Alyssa Farah, portavoz del Departamento de Defensa, dijo en un comunicado que la base estaba lista para proporcionar viviendas al grupo, que incluye a empleados del Departamento de Estado y sus dependientes.
Los evacuados, que serán puestos bajo el cuidado del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HSS), "no podrán acceder a ningún lugar de la base que no sea la vivienda que le fue asignada".
"La responsabilidad principal del Departamento en este momento es la seguridad de nuestra fuerza, nuestras familias y nuestras comunidades de base", agregó Farah.
No estaba claro cuánto tiempo permanecerían los evacuados en la base y los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades no respondieron de inmediato a una consulta de AFP.
El periodo máximo de incubación del virus -la brecha entre la infección y la aparición de síntomas- es de dos semanas, aunque en algunos casos los síntomas han surgido en cuestión de días.
Tampoco está completamente claro si la transmisión puede ocurrir si un paciente aún no muestra síntomas.