Desde la infancia, los padres destacan la importancia del desayuno, pero con el paso del tiempo se vuelve más complicado ingerir los primeros alimentos del día, a causa del empleo, la familia y otro tipo de actividades.
Una de las peores formas de comenzar el día es saltándose el desayuno, pues al omitirlo se pierden grandes beneficios para la salud.
Consumir porciones adecuadas de alimento a la hora del desayuno ayuda a no sentir tanta hambre a los largo del día y a evitar la tentación de comprar comida chatarra para no sentir un hueco en el estómago.
Además, esta comida otorga la energía que necesita el cuerpo para mantenerse activo. Algunas personas no desayunan para tratar de bajar de peso, pero el efecto es contrario, pues el organismo buscará alimentarse de la fibra muscular magra.
Los primeros alimentos del día activan el metabolismo y esto ayuda a quemar más calorías, aunque se deben elegir productos saludables. Si se evita el desayuno, el organismo tratará de almacenar la mayor cantidad de calorías que le sea posible, lo que contribuye al aumento de peso.
En los niños y adolescentes menores de 18 años, el desayuno ayuda a tener un mejor rendimiento cognitivo en la escuela.
No ingerir comida por la mañana puede incrementar el riesgo de desarrollar enfermedades cardiacas y problemas de presión arterial alta, pues es más probables que las personas sacien su hambre con alimentos que tienen muchos carbohidratos y grasas saturadas, de acuerdo con la Clínica de Cleveland.
Consulta en la galería de arriba algunas recomendaciones de alimentos para preparar un desayuno saludable.