La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) emitió una autorización de uso de emergencia a nueva prueba que detecta los anticuerpos del coronavirus hecha por Abbott Laboratories.
A través de un comunicado de prensa, Abbott dijo que planea enviar 30 millones de pruebas durante este mes y 60 millones en junio.
Las pruebas de anticuerpos se tratan de análisis de sangre de serología (estudio de los sueros biológicos) que normalmente se encargan de detectar enfermedades virales como la rubéola, sarampión, VIH, sífilis, enfermedades respiratorias, entre otras.
En el caso del coronavirus, las pruebas ayudan a la búsqueda de anticuerpos, que son proteínas producidas en respuesta a infecciones; y a comprender mejor su composición, el tiempo que dura dentro del cuerpo y qué cantidad de la población es afectada, según indican datos de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés).
Asimismo, están diseñadas para indicar si una persona ha tenido Covid-19, si fue asintomática o si se recuperó.
De acuerdo con las autoridades de salud, los resultados de las pruebas de anticuerpos no se utilizan para diagnosticar a un paciente con una infección activa por SARS-CoV2, virus que produce el Covid-19. Deben pasar entre 1 y 3 semanas para que una persona infectada comience a desarrollar anticuerpos.
Las nuevas pruebas de Abbott logran excluir falsos positivos un 99.6 por ciento de las veces y 100 por ciento los falsos negativos en pacientes evaluados 14 días después que comenzaron los síntomas.
“Tener más opciones de pruebas altamente confiables en nuestras plataformas ayudará a los trabajadores de la salud y a los funcionarios de salud a medida que realizan pruebas a gran escala para Covid-19”, dijo Robert Ford, CEO de Abbott en un comunicado.
Estas pruebas de Abbott no son las primeras en llegar, con anterioridad, el laboratorio ya había lanzado tres tipos de análisis aprobados por la FDA que se utilizaron en hospitales de Estados Unidos, con pruebas moleculares y de anticuerpos amplias que ofrecían seguridad y confiabilidad.
Para la cuarta prueba, la FDA decidió endurecer sus políticas en torno a los nuevos análisis luego de que varias compañías realizaran y comercializaran sus propios prototipos de manera incorrecta, con poca supervisión y nula confiabilidad.
Los CDC evalúan de forma contínua pruebas fabricadas comercialmente en colaboración con la Autoridad de Investigación y Desarrollo Biomédico, la FDA, Institutos Nacionales de Salud, el Departamento de Defensa y la Oficina de Política de Ciencia y Tecnología de la Casa Blanca.
No te pierdas de las últimas noticias de Vive Usa en Google News, síguenos aquí