Durante el regreso a clases, miles de padres de familia publican fotografías de sus hijos en redes sociales, donde sus pequeños usan el uniforme escolar.
Los padres publican estas fotografías con orgullo porque sus hijos inician un nuevo ciclo escolar, pero la acción involucra un riesgo potencial.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos admite que no hay un impedimento legal para publicar fotografías de los hijos, pero pide no subir imágenes donde usan el uniforme escolar. ¿Por qué?
El uniforme escolar tiene información específica sobre el paradero de los niños, que puede ser usada por delincuentes. A menudo tiene el nombre de la escuela, la zona escolar y en algunos casos hasta la dirección.
Algunos padres también bordan el nombre sus hijos en el suéter. En comunidades pequeñas, la misma tela del uniforme indican dónde estudia el menor.
eSafety parents and carers, del gobierno australiano, agrega: “Evite agregar comentarios a las fotos que identifiquen ubicaciones, por ejemplo, las direcciones de las calles, el nombre de la escuela de su hijo o incluso identificar las características enfrente de su hogar. Asegúrese de que los horarios de las actividades de los niños no se compartan en línea”. Nunca compartas credenciales escolares.
La información personal recopilada en línea puede ser usada para estafas, fraudes, extorsiones, contactos no deseados, robo de identidad, acoso cibernético e incluso puede escalar a delitos graves como el secuestro.