Los cigarros electrónicos cobraron gran fama por ser una supuesta alternativa para que los fumadores activos dejaran a un lado su adicción, aunque son más dañinos de lo que se puede pensar.
Un estudio realizado por investigadores del Departamento de Medicina Genética de la Universidad Médica de Weill Cornell reveló que estos dispositivos electrónicos también dañan los pulmones de quienes lo consumen, aunque nunca antes hayan fumado.
Los cigarros electrónicos emiten vapor con saborizantes, propilenglicol, glicerina y hasta nicotina. El humo de estos dispositivos se inhala como los cigarros convencionales para dejar la misma sensación en los consumidores de tabaco, aunque hay algunas personas sin antecedentes de tabaquismo que están incrementando su uso.
Los científicos aclararon que el daño que ocasionan los cigarros electrónicos es menor al que provocan los normales.
Para el estudio fueron reclutadas 10 personas que nunca habían fumado, de las cuales, siete utilizaron cigarros electrónicos con nicotina y tres lo usaron sin esta sustancia.
Una semana antes de llevar a cabo el experimento, los sujetos fueron analizados sus signos vitales, saturación de oxígeno y función pulmonar. Luego utilizaron el aparato en 20 ocasiones y se volvieron a realizar las pruebas para corroborar su estado de salud.
Este dispositivo puede provocar tos, dificultades respiratorias, disminución de óxido nítrico al exhalar y alteraciones en secreciones como la saliva.
Los análisis determinaron que los aerosoles de estos dispositivos afectan la biología pulmonar normal, aunque no hay evidencia todavía de que puedan causar enfermedades pulmonares.
Los investigadores alertan a los consumidores de este tipo de cigarros a buscar otra alternativa hasta que se tengan mayores estudios sobre el daño que ocasionan.
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