En 1791, George Washingtondecidió el lugar en el que se construiría la residencia oficial del Gobierno de Estados Unidos. En 1800, John Adams fue el primer Presidente del país en instalarse en la mansión y, desde entonces, 48 mandatarios de la Unión Americana han vivido en el lugar.
El “President’s Palace”, como se le nombró, terminó de construirse en 1798 con un gasto total de 232 mil 372 dólares de la época. Al finalizar la edificación, se le colocó cal blanca a las paredes con la finalidad de evitar que las piedras porosas se congelaran.
En 1814, Estados Unidos entró en guerra contra Gran Bretaña, ya que la corona inglesa bloqueó el comercio marítimo de las 13 colonias con Francia desde unos años antes. El ejército inglés arribó a Washington y quemó la joven residencia gubernamental, ocasionándole severos daños.
Un año después, los estadounidenses ganaron la guerra y comenzó la reparación de la mansión. El interior estaba completamente quemado; sin embargo, las paredes exteriores sólo presentaban marcas de humo.
Durante la reedificación, se decidió que la casa se pintaría de blanco sin ninguna razón en especial, como lo señala The White House Historical Association.
El nombre oficial de la residencia del 1600 de Penn Avenue era “Executive Mansion” hasta que en Septiembre de 1901, 101 años después de su construicción, el Presidente Theodore Rooseveltdecidió nombrarla oficialmente como “The White House” (La Casa Blanca).
La Casa Blanca mide 51 metros de largo, 46 metros de ancho y una altura de 21 metros, la más grande del país hasta después de la Guerra Civil, y para pintarla se necesitan 300 galones de pintura blanca.