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Un perro labrador retriever se intoxicó por beber demasiada agua salada en la playa de Dunedin, Florida. Horas más tarde, murió por deshidratación, daños cerebrales y convulsiones.
Su dueño, un estudiante de la Universidad del Sur de Florida, narró a wfla.com que a menudo llevaba a su mascota “OG” a la playa. Sin embargo, un lunes después de estar en el mar, el perro comenzó a vomitar y tuvo diarrea que duró hasta el día siguiente.
Para el miércoles, el perro apenas pudo comer pollo hervido con arroz. De repente, empezó a convulsionar y para cuando Taylor (el dueño) lo llevó al veterinario, ya era muy tarde.
El especialista le dijo que su mascota sufría una severa intoxicación por agua salada. De acuerdo con Pet Poison Hotline, "la intoxicación por sal en perros y gatos provoca signos clínicos de vómito, diarrea, inapetencia, letargo, acumulación anormal de líquidos en el cuerpo, sed excesiva, posibles lesiones en los riñones, temblores, convulsiones, coma e incluso la muerte si no se trata ".
El veterinario concluyó que “OG” se deshidrató y sufrió daños cerebrales y convulsiones. Nada podría hacerse para salvarlo.
La doctora Katy Meyer, de los Servicios Veterinarios de Emergencia de Tampa Bay, dice a wfla que cuando los niveles de sodio son extremadamente altos, afectan el cerebro de lo perros.
“Si desea llevar a su perro a la playa, limite el viaje a dos horas, tomando descansos cada treinta minutos con abundante agua fresca para su familiar de cuatro patas”, aconseja.
Si sospecha que su mascota podría estar intoxicada con agua salada, es importante llevarla al veterinario lo antes posible para que le hagan una "administración cuidadosa de líquidos por vía intravenosa, control con electrolitos, tratamiento para la deshidratación e inflamación cerebral y cuidados de apoyo".
En nuestra galería algunos consejos de seguridad para llevar a tu perro a la playa.