Los gatos son algunos de los animales domésticos más inteligentes del mundo, de acuerdo con la ciencia, a la par de los perros o las aves.
Sus habilidades llegan a destacar incluso más que las de los perros en cuanto a aprender trucos, reconocer nombres o comprender comandos básicos; de hecho, se ha comprobado que los felinos desarrollan una memoria más duradera que los perros.
Una nueva investigación recientemente encontró que, además de su inteligencia, esta especie usa sus sentidos más desarrollados para saber dónde se encuentran sus dueños sin siquiera verlos.
Si bien la inteligencia, sentidos, habilidades y sus instintos naturales no son lo mismo, si van de la mano para ayudar a los gatos a desarrollarse en diferentes entornos.
Un estudio hecho en la Universidad de Kyoto, Japón, encontró que un gato inmóvil puede rastrear la ubicación de su dueño usando señales de audio, específicamente la voz de su amo.
“Vi un gato con sólo una de sus orejas inclinadas hacia atrás, escuchando el sonido detrás de él, y sentí que los gatos deben estar pasando muchas cosas por el sonido”, dijo en el informe Saho Takaji, autora del estudio inspirado en las capacidades auditivas de los gatos.
“Investigué si mapean especialmente la posición de su dueño a partir de los sonidos”, agregó.
La investigación se llevó a cabo en un hogar lleno de gatos y en un local de café con gatos como la atracción principal.
Los científicos observaron cómo los gatos reaccionaban a las voces de sus dueños sin la necesidad de verlos físicamente; los dueños los llamaban por sus nombres a través de parlantes de altavoz
Los parlantes fueron colocados separados entre sí, fuera de la vista de los animales, con el objetivo de estudiar sus respuestas a los sonidos que percibían, la forma en que lo hacían y desde dónde lo hacían.
Un segundo grupo de participantes, que no eran expertos en comportamiento animal, calificó el comportamiento de los gatos y sus niveles de sorpresa en una escala del 0 al 4 cuando se les hablaba.
Los comportamientos se verificaban a través del movimiento de las orejas de los gatos y sus cabezas.
El estudio obtuvo evidencia de cognición socioespacial en los gatos, ya que se sorprendían cuando la voz de sus dueños parecían “transportarse” de un lugar a otro.
Lo anterior significa que pueden imaginarse dónde están sus amos a través de las señales de sonido.
"En general, se cree que los gatos no están tan interesados en sus dueños como los perros, pero resulta que estaban representando mentalmente la presencia invisible de sus dueños", dijo Takagi.
En la investigación, los autores compararon las habilidades de sonido y ubicación de los gatos con las de los monos y suricatas, que pueden crear imágenes mentales basadas en los sonidos y otros estímulos.
"Esta es una habilidad que es la base de la creatividad y la imaginación", dijo Takagi. "Se cree que los gatos tienen una mente más profunda de lo que se cree".
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