La vida sin amigos ni familiares puede ser no solo deprimente también difícil, especialmente cuando vamos envejeciendo.
Fuertes lazos sociales incrementan las probabilidades de mantenerse con vida hasta en un 50% de acuerdo con un estudio del año 2010 basado en 309 mil personas a las que se les dio seguimiento por 7.5 años.
Es difícil determinar si los estadounidenses están más solos que nunca, lo que si es cierto es que son más independientes que nunca.
Casi la mitad de los adultos estadounidenses son solteros, se tardan más en casarse, tienen menos familia y la mitad de los matrimonios terminan en divorcio.
Por estas tendencias, los investigadores están preocupados de que en un futuro cercano haya un gran número de personas adultas sin apoyo suficiente.
13% de los adultos mayores estadounidenses viven solos de acuerdo a datos del 2015 del Centro Nacional para la Familia y el Matrimonio, mientras que en 1990 este porcentaje era del 1%.
Los estadounidenses entre 45 y 65 viven solos en proporciones mayores que nunca antes.
Aunque también se sabe que vivir solo no significa necesariamente estar solo, pues la mayoría de la gente que vive independientemente tienen una activa vida social.
Lo que preocupa a los investigadores es que los adultos mayores se sientan aislados especialmente de miembros de su familia y que no participen como antes de la dinámica familiar que ha reservado un lugar para los ancianos a través de la historia de la humanidad.
6.6 % de los estadounidenses mayores de 55 no tienen ni cónyuge ni hijos biológicos y el 1% no tiene ningún tipo de familiar incluyendo cónyuge, compañero, hijos, padres o hermanos.
En un futuro muchos no tendrán un miembro de la familia a quien recurrir en caso de ayuda.