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Una sonrisa resplandeciente es uno de los elementos más importantes para reflejar una excelente imagen, pero algunas acciones cotidianas podrían dañar fuertemente los dientes y las encías.
La Clínica de Cleveland, en Estados Unidos, recomienda lavarse los dientes después de cada comida que se tiene al día, para poder evitar la aparición de caries.
Uno de los hábitos que más daña la dentadura es utilizarla para morder materiales duros, como hielo, caramelos, las uñas de las manos, lápices y plumas.
Tampoco debe usarse para abrir paquetes, pues puede provocar que los dientes se astillen o se rompan.
Cepillarse los dientes de manera intensa también es perjudicial para la salud bucal, ya sea con cerdas demasiado firmes o al presionar demasiado los dientes y las encías. Lo más recomendable es hacerlo con suavidad y calma.
Uno de los productos más dañinos para los dientes es el tabaco, ya sea en cigarrillos, puros o de forma masticable, ya que reduce el flujo sanguíneo a las encías, disminuye el flujo de saliva, causa más aliento, incrementa el riesgo de desarrollar caries y cáncer oral.
Algunas personas aprietan demasiado su mandíbula, sin notarlo. Sin embargo, este hábito, llamado bruxismo, puede desgastar los dientes con el paso del tiempo, hasta llegar a fracturarlos.
Durante el nacimiento de los dientes, se debe evitar que los niños se chupen los dedos, pues puede provocar la desalineación de los dientes y luego deberán usar brackets para resolverlo.
Consulta en la galería de arriba algunos consejos para mantener tu dentadura blanca y fuerte en todo momento.
