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Cerca del 99 por ciento de las personas que suelen lavarse las manos antes de preparar la comida no lo hacen de la forma correcta, aseguran datos del Departamento de Agricultura de Estados Unidos y Seguridad e Inspección Alimentaria (USDA Food Safety en inglés).
Al no seguir un patrón y un hábito de limpieza, se pueden producir peligrosas enfermedades y transmitirse por los alimentos, como resfriados y gripes comunes de la temporada de frío que ya está aquí, además de infecciones gastrointestinales e intoxicaciones.
A continuación, te presentamos algunos consejos para lavarse correctamente las manos antes de preparar cualquier alimento, según las autoridades de la USDA Food Safety.
1. Mójate las manos con agua limpia y corriente.
2. Enjabona las manos frotándolas entre sí, asegúrate de enjabonar el dorso de las manos, entre dedos y bajo las uñas.
3. Frota por al menos 20 segundos.
4. Enjuaga bien las manos con agua corriente limpia.
5. Sécate bien las manos con una toalla limpia o déjalas secar al aire.
Procura lavarte las manos antes, durante y después de preparar la comida y en los siguientes casos:
-Antes de comer.
-Antes y después de cuidar a alguien enfermo con vómitos o diarrea.
-Antes y después de tratar alguna herida.
-Después de usar el baño.
-Después de limpiar a un niño que usó el baño.
-Después de toser y estornudar.
-Después de tocar un animal, su alimento o sus desechos.
-Después de tocar la basura.
En caso de que no puedas lavarte las manos porque no hay disponibilidad de agua corriente o jabón, utiliza desinfectante a base de alcohol o con al menos 60 por ciento de él.
Los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos señalan que la mejor manera de usar el desinfectante es aplicarlo sobre las manos, frotarlo sobre la palma, el dorso, entre los dedos y bajo las uñas hasta que estén secas.
Consejos para preparar el almuerzo para la escuela a niños y adolescentes
1. Si el almuerzo contiene elementos perecederos como huevo o lácteos, estos deben ir empaquetados con al menos dos capas frías o cerca de elementos fríos para evitar la propagación de bacterias.
2. Congela paquetes de agua o jugos un día antes para que se conserven fríos más tiempo y conserven los alimentos cercanos a buena temperatura.
3. Si la comida es caliente, procura que estén en recipientes aislados y bien cerrados.
4. Empaca el almuerzo de los niños una noche anterior y mételo al refrigerador, así se mantendrá la lonchera fresca junto con el contenido.
