En 1863 el Dr. James Caleb Jackson, un dedicado nutricionista de Nueva York inventó la primera receta de lo que se convertiría en el cereal conocido como granola
La llamó granula y consistía de pedazos de cereal de salvado sin endulzar que horneaban y se adherían al mojarlos en leche.
Si el Dr. Jackson viviera hoy no reconocería en lo que se ha convertido su producto, las barras de granola comerciales, son consideradas un popular alimento saludable por millones de estadounidenses que gastan alrededor de 2 mil millones de dólares cada año en estas.
Sin embargo, refiere The New York Times, las barras de granola contienen tanto azúcar que parecen más un postre que un alimento sano, incluso algunas superan al azúcar contenido en una rebanada de pastel de chocolate.
Aunque se promocionan como una alternativa saludable natural hechas de granos enteros, expertos afirman que se trata de comida chatarra disfrazada de sana.
Las guías de alimentación del gobierno de Estados Unidos las clasifican como “postre” en la misma categoría que las galletas, las donas y el pastel.