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Viajar a la playa con tu pareja y querer tener un recuerdo íntimo en las olas del mar puede no ser tan romántico como parece.
Incluso si la mala suerte acecha a los involucrados el recuerdo será negativo y hasta con implicaciones médicas.
Especialmente si es de noche, tiempo cuando varios animales marinos buscan su comida; o si te excedes con la exposición de la piel a la arena.
El Universal Estados Unidos te presenta las peores cosas de tener encuentros íntimos en la playa.
La arena. Resulta muy molesta, y a veces aunque te enjuagues descubres al bañarte que sigue presente en tu cuerpo; incluso al llegar a casa habrá prendas que la tengan.
Pequeñas criaturas. Desde medusas de mar hasta otros organismos que podrían introducirse en los rincones más privados del cuerpo.
Agua salada. La sal del mar tiende a resecar la piel; cuando se trata de tejidos más sensibles puede ser incómodo; también limita la lubricación natural, así que eso es otro reto a desafiar.
Esperar el anochecer. A menos que sea una playa desértica –lo cual es inseguro también- quienes deseen tener encuentros personales en el mar, deberán esperar a que caiga la noche; pero prácticamente perderán visibilidad de la arena y el entorno.
Protección. Usar un preservativo en la playa es de sumo cuidado pues tienden a romperse por la fricción de la arena.
Gérmenes. La arena o el agua del mar están llenos de microorganismos, los cuales podrían ocasionarte una infección si expones tu cuerpo demás.
Problemas con la ley. Quizás te esfuerces pero la policía suele hacer rondines nocturnos, incluso en las playas públicas. Si te descubren podrías estropear innecesariamente tus vacaciones.
Con información de Women´s Health y Your Tango.
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