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Una buena alimentación es la clave para que el cuerpo humano esté sano y en óptimas condiciones.
Investigaciones científicas han encontrado que ciertos alimentos benefician partes del cuerpo específicas como el rostro, por ejemplo, mientras que el consumo de otros puede afectarlo, desde una hinchazón hasta el aumento de su volumen.
Expertos de la Universidad de Medicina de Chicago dicen que la hinchazón del rostro por la dieta, como otro tipo de hinchazones de piel, se debe a una respuesta normal del cuerpo que le indica al sistema inmunológico que algo anda mal y que necesita combatir infecciones o curar algún tipo de lesión.
La inflamación por alimentos puede convertirse en crónica y se controla mejorando el estilo de vida y llevando una dieta antiinflamatoria, pero no se erradica.
Evita estos alimentos para reducir la hinchazón del rostro
Los dietistas señalan que el consumo de sodio promueve la inflamación del rostro; se encuentra principalmente en alimentos como la carne procesada, salchichas, jamón, tocino y embutidos, por lo que sugieren evitar comerlos con frecuencia.
El sodio en estos alimentos hinchan el rostro debido a su probabilidad de promover la retención de agua y la inflamación.
Otros alimentos que los médicos sugieren evitar son los alimentos ultraprocesados que tienen cantidades significativas de sodio y azúcares añadidos como pizza, hot dogs, galletas, pasteles, dulces, pan dulce, helados, hamburguesas, así como alimentos fritos.
El pan blanco, cereales refinados, alcohol, pretzels, refrescos, condimentos y aderezos también deben evitarse en la dieta diaria.
“Todos los alimentos procesados pueden causar inflamación. Pueden alterar las bacterias que viven en nuestro intestino, y esa alteración tiene la capacidad de interactuar con nuestro sistema inmunológico y eventualmente desencadenarlo de una manera que conduce a una inflamación crónica”, dice Chicago.
¿Qué se debe comer para evitar la inflamación del rostro?
Los expertos dicen que la hinchazón del rostro puede controlarse a través de una alimentación sana constante con dietas mediterráneas, basadas en plantas, bajas en carnes rojas y de alimentos procesados.
Otros alimentos que sugieren añadir a la dieta diaria son aquellos ricos en antioxidantes como las nueces, el aceite de oliva, frijoles, verduras, frutas y el chocolate amargo.
“Para marcar una diferencia significativa, es necesario centrarse en hábitos alimentarios a largo plazo y un estilo de vida antiinflamatorio”, dice la Universidad de Chicago.
“Si tiene un estilo de vida inflamatorio, comer un sólo alimento antiinflamatorio no lo solucionará”, agregó.
Además de reducir la inflamación, comer estos alimentos y evitar los ya mencionados pueden prevenir enfermedades crónicas como resistencia a la insulina, diabetes de tipo II, obesidad y hasta cáncer.
