No hay un solo tipo de viaje: algunos nos llevan a la aventura extrema, otros los realizamos para aprender y la mayoría para descansar. Ahora un nuevo estudio aborda cómo el turismo puede proporcionar beneficios reales para la salud.
Investigadores de la Universidad Edith Cowan (ECU) hallaron que “muchos aspectos de irse de vacaciones” podrían tener un impacto positivo en las personas con problemas o afecciones de salud mental.
El Dr. Jun Wen, investigador principal del estudio, dijo que su equipo de expertos en turismo, salud pública y marketing investigó cómo el turismo podría beneficiar a las personas que viven con demencia.
“Los expertos médicos a menudo recomiendan tratamientos para la demencia como la musicoterapia, el ejercicio, la estimulación cognitiva, la terapia de reminiscencia, la estimulación sensorial, las adaptaciones a la hora de comer y el entorno del paciente. Todos están cuando la gente está de vacaciones”.
El Dr. explicó que los viajes involucran de manera efectiva esas esferas. Por ejemplo:
1) Los nuevos lugares y experiencias proporcionan estimulación cognitiva y sensorial.
2) En los viajes se camina más al aire libre y generalmente implican una mayor actividad física.
3) Las comidas con familiares y amigos en los viajes influyen positivamente en el comportamiento alimentario de los pacientes con demencia.
4) El aire fresco y la luz del sol aumentan los niveles de vitamina D y serotonina.
5) Además, "se ha descubierto que el turismo aumenta el bienestar físico y psicológico".
Durante los últimos meses se ha llamado a evitar los viajes debido a la pandemia de Covid-19, pero los expertos de la Universidad Edith Cowan apuntan que pasando la epidemia podrá ser seguro.
“Tendrá que haber más investigación empírica y evidencia para ver si el turismo puede convertirse en una de las intervenciones médicas para diferentes enfermedades como la demencia o la depresión”, añaden.
Otros beneficios de tomar vacaciones:
Un estudio realizado por la Universidad de Syracuse Bryce Hruska y Brooks Gump reveló que las personas que vacacionan con más frecuencia en un año tienen un menor riesgo de síndrome metabólico.
El síndrome metabólico es una colección de factores de riesgo de enfermedad cardiovascular, como colesterol alto, obesidad y presión arterial alta. Las vacaciones ayudan a las personas a desestresarse y hay probabilidades de que realicen actividad física, por lo que se reducen los riesgos.
Tomar vacaciones podría prolongar la vida. Ese es el hallazgo de un estudio de 40 años publicado en The Journal of Nutrition, Health & Aging.
“En nuestro estudio, los hombres con vacaciones más cortas trabajaron más y durmieron menos que aquellos que tomaron vacaciones más largas. Este estilo de vida estresante puede anular los beneficios de hábitos como el ejercicio”, señalaron los investigadores y agregaron que el estrés es un factor tan dañino como una mala alimentación.
Las vacaciones más cortas se asociaron con un exceso de muertes en el grupo estudiado. Los hombres que se tomaron tres semanas o menos de vacaciones anuales tenían un 37% más de posibilidades de morir entre 1974 y 2004 que los que se tomaron más de tres semanas.
“La reducción del estrés es una parte esencial de los programas destinados a reducir el riesgo de enfermedad cardiovascular. Los consejos sobre el estilo de vida deben combinarse sabiamente con el tratamiento farmacológico moderno para prevenir enfermedades cardiovasculares en individuos de alto riesgo”, explican.
Actualmente las vacaciones también deberían significar desconectarse de los mensajes de WhatsApp, del correo electrónico y otras aplicaciones móviles.
Estar desconectado del correo electrónico del trabajo reduce significativamente el estrés y permite que los empleados se concentren mucho mejor cuando vuelven, según un estudio realizado por investigadores de la Universidad de California Irvine y US Army.
Aquellos que no vieron el correo electrónico durante cinco días experimentaron frecuencias cardíacas variables más normales y disminuyeron su estrés.
Un estudio de Glassdoor apuntó que trabajar durante las vacaciones afecta negativamente la motivación intrínseca y hace que disfrutemos menos nuestra labor.
De acuerdo con la Universidad de Harvard, varios estudios indican que el rendimiento cae en picada cuando se trabaja durante períodos prolongados sin descanso.
“Los beneficios de tomarse unas vacaciones son claros: da como resultado una mayor productividad, menos estrés y una mejor salud mental en general. También se estimula la creatividad”, señalan.
Nuestra salud mental mejora al tomar vacaciones regularmente, pues se libera serotonina, la hormona de la felicidad. Únicamente debemos descubrir qué nos hace felices.
“¿Cuál es tu idea de recreación? ¿Qué te permite recargar energía? ¿Qué te nutre? Para algunos, es tomar el sol junto al agua. Para otros, es una búsqueda creativa, explorar una nueva ubicación, probar un nuevo platillo o participar en un deporte de aventura”, anotan.