TE RECOMENDAMOS
Aunque los seres humanos se han teñido el pelo por miles de años experimentando con distintas fórmulas, algunas más tóxicas que otras, hoy en día la industria del tinte continúa usando algunos métodos anticuados que preocupan sobre los efectos que tienen en la salud de quienes se tiñen el cabello.
William Henry Perkin es el padre de los tintes modernos, el químico británico desarrolló los primeros tintes sintéticos cuando buscaba un tratamiento para la malaria.
El agente que propicia el cambio de color de pelo es el amoníaco que separa las capas protectoras de la proteína del cabello permitiendo que los componentes de color penetren y coloren la pigmentación del pelo.
Además del amoníaco las fórmulas para teñir el pelo contiene peróxido de hidrogeno, un agente decolorante, que al entrar en contacto con la melanina extingue el color natural.
¿Es seguro teñirse el cabello?
Hay algunos estudios que hablan de los riesgos potenciales de los teñidos frecuentes. En 2001 investigadores de la Universidad del Sur de California publicaron un documento en The International Journal of Cancer en el que concluían que las mujeres que frecuentemente se tiñen el pelo están en riesgo dos veces más de desarrollar cáncer en la vejiga que aquellas que se abstienen.
La industria de los cosméticos es una de las más poderosas del mundo, según proyecciones en 2019 obtendrá ganancias por 316 mil millones de dólares y los productos para el pelo son una de la porción mayor, con un cuarto de las ganancias.
En Estados Unidos los servicios de teñido de pelo representan el 18% de las ganancias de los salones.
Se estima que hasta el 70% de las mujeres en Estados Unidos usan productos para tenerse el pelo, y el 69% lo hace porque se sienten más atractivas, según el sitio Statistia.