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A partir de este viernes 24 de abril, los gimnasios, barberías, estéticas y salones de manicura podrán empezar a recibir clientes en Georgia, “siguiendo pautas de distanciamiento social”, anunció el gobernador Brian Kemp.
El republicano basó su decisión argumentando que “a diferencia de otras empresas, estos negocios no han podido administrar el inventario, manejar la nómina y ocuparse de la administración desde casa”.
Marc Lipsitch, profesor de epidemiología y director del Centro de Dinámica de Enfermedades Transmisibles de la Escuela de Harvard T.H. Chan, considera que es un “riesgo muy grande” reabrir negocios cuando el número de contagios aún es muy alto.
“Si el estado ‘se abre lo suficiente’, es casi seguro que el virus volverá a afectar a Georgia. El virus sólo está esperando a las personas más vulnerables y más contactos. Así es como funcionan los virus”, advierte.
En una entrevista con el diario The Washington Post, el director de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC), Robert Redfield, dijo que existe la posibilidad de una segunda ola de Covid-19.
“Existe la posibilidad de que el ataque del virus el próximo invierno sea incluso más difícil que el que acabamos de atravesar. Vamos a tener la epidemia de gripe y la epidemia de coronavirus al mismo tiempo”, reflexionó y agregó que sería una tensión “inimaginable” al sistema de atención sanitaria.
Medidas para la reapertura de negocios en Georgia
Tras las críticas a su plan de reapertura, el gobierno estatal publicó las pautas que deberán seguir los negocios al abrir.
Verificaciones de temperatura: los salones deben considerar el uso de un termómetro infrarrojo sin contacto para verificar la temperatura de los empleados cada día y de cada cliente que ingresa al salón / tienda.
Preguntas de detección a los clientes: ¿Ha tenido tos? ¿Has tenido fiebre? ¿Has estado cerca de alguien que exhibió estos síntomas en los últimos 14 días? ¿Vives con alguien enfermo o en cuarentena?
Límite de personas en tiendas / salones: Clientes sólo con cita previa. Se recomienda que los clientes esperen fuera del salón / tienda en su vehículo hasta que la cosmetóloga o el barbero estén listos para atenderlos.
Distancia social: el espacio entre las personas en el salón debe ser de al menos dos metros en todo momento.
Uso de equipo de protección personal y mejores prácticas: los empleados del salón / taller deberán usar cubrebocas en todo momento. También, guantes, capas desechables o lavables.
Desinfección: Todos los salones deben limpiarse y desinfectarse a fondo antes de volver a abrir.
Administración: se espera que los empleados enfermos se queden en casa. Los propietarios deben proporcionar capacitación, materiales educativos y refuerzo sobre el saneamiento adecuado, el lavado de manos, la etiqueta de tos y estornudos.