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Las personas que hacen deporte o ejercicio a diario mantienen una duda muy importante: ¿es mejor desayunar antes o después de la rutina?
De todos es sabido que la alimentación es vital para la actividad física y que el desayuno es la comida más importante del día. Sin embargo, existen tantas opiniones contradictorias sobre una pregunta que hemos escuchado durante años.
De acuerdo con BBC World, por un lado hay estudios que concluyeron que entrenarse en ayunas impulsa la pérdida de peso, pero también hay otros que resaltan los beneficios de comer para lograr un mejor rendimiento.
Para la nutricionista argentina Cynthia Zyngier, especialista en deportes, lo principal es la alimentación previa a la práctica deportiva. "Lo recomendable es comer hidratos de carbono complejos como pastas, arroz, papa, pan, legumbres unas dos horas antes de la práctica".
La idea es que este tipo de alimentos se digiere rápidamente y le provee al cuerpo la energía necesaria para el movimiento. Sin embargo, muchas personas no tienen dos horas para digerir un plato de pastas o legumbres con arroz.
"A esas personas se le recomienda hidratos de carbonos simples como leche o un yogurt, que se digieren más rápido y son ideales por ejemplo para quienes salen a la mañana a hacer ejercicio", señaló Zyngier.
Pero, ¿qué no se debe comer antes de ir al gimnasio a mover el cuerpo? Cualquier alimento que mantenga ocupado al estómago: "Dos cosas claves, no ingerir alimentos con alto contenido graso o de fibra. Por lo general, éstos se demoran cinco o seis horas en ser digeridos", dijo Zyngier. El pan negro, las cáscaras de las frutas o los alimentos considerados integrales son parte de este grupo.
Daniel Escaño, nutricionista deportivo especializado en alto rendimiento en NutriciónDE: Alto Rendimiento Deportivo, asegura que dado que la persona mantuvo una largo periodo de ayuno durante la noche, es vital que coma algo.
"Es vital e imprescindible ingerir algo de comer antes de hacer ejercicio", dice el especialista, aclarando que el tipo de alimento y la cantidad puede variar dependiendo de la actividad física que se va hacer.
"Cuando te levantas es necesario ingerir algo para que el global del organismo pueda funcionar correctamente y llevar a cabo el trabajo muscular", dice.
“La metodología más eficiente para disminuir los niveles de grasa en el cuerpo es una buena alimentación y después los trabajos intervalos de alta intensidad. Si no tienes gasolina en el músculo, glucógeno, es muy difícil que puedas hacer ese tipo de ejercicios", explica el nutriólogo.
Escaño reconoció que en ayunas se pueden hacer ejercicios de baja intensidad y duración media, para activar el cuerpo, pero insiste en que si se va hacer ese tipo de entrenamiento sigue siendo recomendable consumir algo que te ayude a que el trabajo resulte más llevadero.
En un escenario ideal, las personas deberían desayunar unas dos horas y media antes de someter al cuerpo a una rutina de ejercicios, pero eso es algo que resulta imposible para la mayoría.
Por eso, Escaño recomienda una pequeña ingesta unos 30 minutos antes de la actividad física con alimentos que no sean difíciles de digerir.
"Una pieza de fruta como una banana, o un lácteo desnatado, siempre que no sean muy grasos. También puede ser un pan tostado o una barra de cereales y energética", explica.
Luego del entrenamiento si se puede comer un desayuno más completo con alimentos que ayuden a la recuperación del cuerpo, en lo que se conoce como la ventana anabólica.
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