La obesidad en adultos se ha convertido en una de las crisis de salud pública y económica más importantes de los últimos años dentro de Estados Unidos.
Esta afección médica, vinculada con graves enfermedades crónicas como diabetes de tipo II, problemas cardiovasculares, presión arterial alta y cáncer; les cuesta a los estadounidenses un promedio de $147 mil millones de dólares por año, sugieren los más recientes registros de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés).
Tan sólo entre 2015 - 2016, la prevalencia fue del 39 por ciento y afectó a más de 93.3 millones de adultos, una tasa que ha ido aumentando con consideración desde 1980 hasta nuestros días y que podría multiplicarse para el 2030, según predice la ciencia.
Un estudio elaborado por investigadores de salud pública de Harvard afirma que para finales de la década, más de la mitad de la población estadounidense será obesa y una cuarta parte tendrá obesidad severa.
“La obesidad está en aumento en términos de la cantidad de personas que la padecen, y el grado o la gravedad de la obesidad está aumentando”, dijo en el informe Zacary Ward, autor y analista de Harvard.
De acuerdo con la pesquisa, el sector poblacional más propenso a desarrollar obesidad o a empeorarla son las mujeres negras no hispanas, los adultos afroamericanos y personas con ingresos familiares inferiores a $50 mil dólares por año.
Para 2030 se espera que al menos el 21 por ciento de los hombres sean severamente obesos, en comparación con un 28 por ciento de las mujeres.
Los estados más afectados podrían ser Oklahoma con 58.4 por ciento de su población; Alabama, Arkansas y Mississippi con 58.2; Virginia Occidental con 57.5 y Louisiana con 57.2 por ciento.
En tanto, las entidades con mayor tasa de obesidad severa se cree que serán Arkansas con un 32.6 por ciento de su población; Oklahoma con 31.7 y Mississippi con 31.7 por ciento.
Se predice que los estados y distritos que mantendrán su tasa de obesidad baja serán: Distrito de Columbia, Colorado, Hawái, California, Massachusetts y Nueva York.
Los especialistas llegaron a estas conclusiones basados en datos de 6.2 millones de personas que participaron vía telefónica en encuestas sobre riesgos de comportamiento hechas por los CDC entre 1993 y 2016.
Entre los datos proporcionados se encuentra la altura, el peso corporal, ingresos anuales y tipo de población.
Se llegó a la conclusión que las principales causas de <span >obesidad</span> son los alimentos con alto contenido de calorías y grasas; escasa o nula actividad física y muchas horas sentado frente al televisor o en un escritorio.