Un estudio de la Universidad Estatal de Washington evalúa el riesgo de que el avispón asesino asático pueda extenderse por Estados Unidos.
Fue en mayo cuando se reportó por primera vez el avistamiento de esta especie en Washington y en julio lo capturaron. Pero los científicos temen que pueda extenderse hacia otros territorios.
Los entomólogos advierten que si el avispón gigante asiático se afianza en el estado de Washington, eventualmente podría extenderse hacia gran parte de la Costa Oeste y provocar impactos negativos en el medio ambiente, la economía y la salud pública.
“Es más probable que se establezca en áreas con temperatura media anual de cálida a fría, alta precipitación y alta actividad humana. Las simulaciones de dispersión muestran que podría extenderse rápidamente por todo el oeste de América del Norte sin contención”, anotan.
Los investigadores agregan que, dados sus posibles impactos negativos y su capacidad de propagación, se justifican esfuerzos extensos de monitoreo y erradicación en todo el oeste de América del Norte.
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Afortunadamente, hasta ahora descartan que el avispón asesino pueda propagarse por todo el país, debido a que al sur hay temperaturas calurosas y extremas.
“Por lo tanto, a menos que sean movidos por humanos, sería casi imposible que los avispones cruzaran el país por su cuenta. El transporte humano del avispón gigante asiático también es raro, por lo que no creemos que otras partes del país deben estar preocupadas por ahora”, dijo Gengping Zhu, líder del estudio al medio USA Today.
El Departamento de Agricultura del Estado de Washington (WSDA) dice que el avispón gigante proveniente de Asia ( Vespa mandarinia ) es la especie de avispón más grande del mundo.
Es peligroso para el equilibrio medioambiental porque ataca y destruye las colmenas de abejas. Unos cuantos avispones pueden destruir una colmena en cuestión de horas.
“Los avispones entran en una ‘fase de matanza’ en la que matan abejas decapitándolas. Luego defienden la colmena como propia, tomando las crías para alimentar a sus propias crías. También atacan a otros insectos, pero no se sabe que destruyan poblaciones enteras de esos”.
Los avispones asesinos generalmente no atacan a las personas ni a sus mascotas a menos de que se vean amenazados.
“Su aguijón es más largo que el de una abeja y su veneno es más tóxico. También pueden picar repetidamente”, advierten.