¿Eres el peor en tu clase de idiomas? La solución a tus problemas de pronunciación podría estar a una copa de alcohol.
Un estudio, publicado en el Journal of Psychopharmacology, sugiere que la capacidad para hablar un segundo idioma mejora después de haber consumido una dosis baja de alcohol.
Los investigadores realizaron estudios y experimentos con 50 alemanes que habían aprendido holandés, recientemente. Algunos participantes consumieron una dosis baja de bebidas alcohólicas antes de conversar con holandeses nativos y a otros se les dio una bebida sin alcohol.
“La dosis exacta de alcohol varió, según el peso corporal de los participantes, pero fue equivalente a poco menos de una pinta (460 ml) de cerveza al 5%, para un hombre de 70 kilogramos”.
La discusión entre alemanes y holandeses se grabó en audio. Posteriormente, fue evaluada la pronunciación de los bilingües.
Los investigadores encontraron que quienes probaron dosis bajas de alcohol mejoraron su pronunciación en comparación con aquellos que no lo habían bebido.
“El consumo agudo de alcohol puede tener efectos beneficiosos en la pronunciación de un idioma extranjero”, señalaron.
¿Por qué pasa esto?
El alcohol tiene un efecto sobre las funciones cognitivas y motoras. Las funciones ejecutivas que incluyen la capacidad de recordar, prestar atención e inhibir comportamientos son particularmente sensibles.
“El alcohol aumenta la confianza en uno mismo y reduce la ansiedad social. Estos factores mejoran la capacidad del lenguaje cuando se interactúa con otra persona”, explica la doctora Inge Kersbergen, del Instituto de Psicología, Salud y Sociedad de la Universidad de Liverpool.
Pero, ojo. ¡No tan deprisa! Los niveles más altos de alcohol podrían tener el efecto contrario y hacerte pasar vergüenzas.
"Debemos ser cautelosos acerca de las implicaciones de estos resultados hasta que sepamos más sobre las causas.Se necesita más investigación para probar esto al 100 por ciento".
En nuestra galería, te decimos los pros de beber alcohol moderadamente.