En el proceso de bajar de peso, uno de los retos más difíciles es disminuir la papada, el cúmulo de grasa que se forma debajo de la línea de la mandíbula.
Chris Dempers, especialista en salud y ejercicio de Cleveland Clinic, explica que, por lo general, una papada se corresponde con el exceso de peso.
“A medida que las personas aumentan de peso, muchas lo hacen de manera uniforme en todo el cuerpo, incluso en el área de la cara y la barbilla”, señala.
No obstante, los factores genéticos y forma de la cara también pueden influir en que sea más delgada o ancha.
El experto remarca que “no hay evidencia científica que respalde una forma clara de perderlo además de la dieta y el ejercicio”. Por lo tanto, si quieres deshacerte de ella será necesario que realices actividad física y tomes hábitos más saludables. No hay remedios mágicos.
1. Hay pequeños dispositivos que se colocan en la boca y se muerden para ejercitar los músculos de la cara y el cuello.
“Con un uso adecuado, pueden ayudar a mejorar la línea de la mandíbula aumentando los músculos de la mandíbula”, anota. Pero si se usan de manera incorrecta pueden ser contraproducentes y producir lesiones.
2. Realizar ejercicio por una hora al día se reflejará en tu cuerpo y comenzarás a ver cómo disminuye el volumen de la papada. Si eres principiante, comienza por ejercitarte 15 minutos al día y gradualmente sube el tiempo y la intensidad.
Cleveland Clinic recomienda tener un compañero de ejercicio para motivarse mutuamente.
3. La mejor manera de disminuir la papada es adoptar una alimentación saludable. Aumenta la ingesta de verduras y disminuye los embutidos, carne roja y alimentos fritos.
4. Descarga una aplicación para hacer un seguimiento de las calorías que consumes y quemas. “Todo el mundo necesita una cantidad diferente de calorías. Estas aplicaciones le permiten ingresar su información biométrica para que puedan calcular su tasa metabólica o la asignación de calorías”, señala Chris Dempers.
Si bien los recuentos de calorías ideales varían, Dempers advierte que nunca se deben comer menos de 1200 calorías al día.
“Reducir 500 calorías al día suma rápidamente para ver resultados en su cintura y en su mandíbula”, señala el nutriólogo.