Ansiedad y estrés. Foto: Pixabay
Aislamiento social. Foto: Pixabay
Pérdida de memoria. Foto: Pixabay
Envejecimiento prematuro. Foto: Pixabay
Disminución en la tolerancia al dolor. Foto: Pixabay
Envejecimiento de la piel. Foto: Pixabay
Aumento de peso. Foto: Pixabay
Presión alta. Foto: Pixabay
Resistencia a la insulina y diabetes. Foto: Pixabay
Reducida capacidad para combatir infecciones. Foto: Pixabay
Mayor riesgo de Alzheimer. Foto: Pixabay
Desarrollo de enfermedades del corazón. Foto: Pixabay