Tener un perro en casa aporta un sinfín de beneficios a la salud de sus humanos, uno de ellos es el desarrollo de una vida feliz y llena de alegrías.
Una investigación compartida en la revista Plos One dice que los perros pueden mejorar el ánimo de los humanos con tan sólo tocarlos o alimentarlos.
La evidencia fue encontrada por los expertos a partir de un estudio en el que midieron las ondas cerebrales durante actividades humanas con perros como juegos, caricias, masajes, alimentación, interacción física como abrazos y paseos.
Los perros participantes fueron poodles y labradores, dos de las razas más populares en el mundo; ésta última la raza más utilizada como perros de terapia, compañía y de apoyo emocional.
El estudio se realizó en Corea del sur con la participación de 15 mujeres y 15 hombres de entre 20 y 40 años de edad, de los cuales algunos tenían mascotas y el resto no.
La pequeña investigación encontró que las interacciones humanas y perrunas produjeron un efecto positivo, con sensación de relajación por más tiempo y sensación de alegría y felicidad.
“Este estudio demostró que determinadas actividades caninas podían activar una mayor relajación, estabilidad emocional, atención, concentración y creatividad al facilitar una mayor actividad cerebral”, escribieron los autores en sus conclusiones.
“Además, las interacciones con perros pueden reducir el estrés e inducir respuestas emocionales positivas”, agregaron.
Otra investigación de Harvard dice que los perros promueven la sensación de felicidad y de bienestar en cualquier humano, ya sea en niños o adultos mayores.
Los expertos explican que cuando existe apego hacia un perro, se crean efectos cerebrales biológicos que reducen el estrés y aumentan los niveles de la serotonina y la dopamina, hormonas de la felicidad, la recompensa y la satisfacción.
Tener un perro es una de las fuentes de alegría más preciadas por los humanos y estudiadas por la ciencia; el Día Mundial de la Alegría y el Mes de la Alegría reconocen y celebran este tipo de alegrías de la vida cada 1 de agosto.
La celebración, fundada el 1 de agosto y extendida durante todo el mes, surgió en 1999 de la mano de la Sociedad Secreta de Personas Felices.
Según los datos, la celebración fue creada para que los humanos se centren en los aspectos positivos de la vida y en las cosas que los hacen felices y les alegran cada día.
Originalmente el Día Internacional de la Alegría se llamó Día de Admitir que Eres Feliz y se extendió a todo el mes con el objetivo de que las personas reconozcan sus fuentes de felicidad, las admitan, extiendan su felicidad y alegría con otros e identifiquen lo que les hace sentir bien y de esta forma.