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¿Te has preguntado qué tan sucio es un avión? El sitio Travel Math envió a un microbiólogo para que tomara 26 muestras de cinco aeropuertos estadounidenses. Y sí, esos lugares atiborrados de personas están llenos de gérmenes.
Las mesas plegables son los objetos más sucios, con 2.155 unidades formadoras de colonias por cada pulgada cuadrada. Ocho veces más bacterias que los botones de los inodoros.
Los asientos del avión también están sucios, sobre todo los que están junto al pasillo. Para evitar el riesgo de enfermedades, la compañía Recaro Aircraft Seating GmbH desarrolla asientos con una tela desinfectante que destruye casi todos los gérmenes en segundos.
El director Mark Hiller dice al portal Bloomberg que los asientos de clase ejecutiva no sólo se desinfectarán, sino que también darán masajes. Se espera que los asientos estén listos en dos años.
"La individualización es clave. El objetivo, dijo, es crear una habitación de hotel en el cielo", señalan sus creadores. También crearon una aplicación para que cada pasajero controle la configuración de su asiento desde su dispositivo.
Recaro produce cerca de 120.000 asientos de avión cada año, pero ahora están enfocados en procurar la salud de los pasajeros. El recubrimiento antimicrobiano fue desarrollado por el equipo tecnológico de la compañía.
Bloomberg informa que Recaro trabaja en tecnología para ofrecer más control sobre el ruido, la luz y la temperatura en el espacio aéreo personal de un pasajero.
La compañía PearsonLloyd también acaba de lanzar asientos que favorecen la salud muscular de las personas. Diseñó asientos con respaldo para apoyar la cabeza. Puede ajustarse para las personas más altas.
Si quieres evitar enfermedades, checa cuáles son las partes más sucias de un avión en nuestra galería.
