La mandarina es una fruta deliciosa y barata en la temporada del otoño pero, ¿te has preguntado qué propiedades tiene?
Esta fruta proviene de la familia Citrus y, según datos de Divi, es el cítrico más cultivado del mundo después de la naranja.
Actualmente existen cuatro tipos principales de mandarina:
Ya sea en gajos o en jugo, esta fruta aporta numerosos beneficios a la salud. Contiene vitaminas que fortalecen el sistema inmunológico y estimulan la producción de colágeno. A continuación, las propiedades que te harán amarla aún más.
Las mandarinas ayudan a prevenir el envejecimiento prematuro gracias a sus antioxidantes. También son ricas en vitaminas A y C, por lo que pueden prevenir infecciones, resfriados y son buenas para la salud ocular. Tienen hierro, potasio, ácido fólico, fibra y flavonoides.
El corazón es uno de los órganos más importantes y afortunadamente existen alimentos para mantenerlo sano y fuerte. Las mandarinas pueden cumplir esta tarea debido a sus flavonoides y antioxidantes, pues favorecen la circulación y mantienen las arterias limpias, libres de placa dañina.
De acuerdo con Citrus.com, las mandarinas pueden reducir el estrés y la ansiedad porque, al comerlas, el cerebro aumenta la producción de neurotransmisores que logran tranquilizar los nervios y favorecen el buen humor.
La diabetes trae como resultado el estrés oxidativo que puede ser perjudicial para la salud. Pero los flavonoides presentes en las mandarinas, como la naringenina y la esperidina, generan una actividad antioxidante antihiperglucémica que resulta ser de gran ayuda para los diabéticos. Es importante que la coman en gajos y no en jugo.
Son útiles para la pérdida de peso por los polifenoles cítricos que han demostrado su eficacia al nivelar el metabolismo de los lípidos. Además son bajas en calorías y ricas en fibra, lo que fomenta una buena salud digestiva.
Todos los cítricos son altamente alcalinos. Esto quiere decir que han crecido en tierras con un buen equilibrio de minerales o que están 100% libres de pesticidas, lo que los hace aún más saludables que el resto de las frutas que no tienen estas características.
Gracias a su alcalinidad, el consumo de mandarinas puede eliminar del organismo las toxinas acumuladas y ácidos fuertes, logrando una adecuada desintoxicación.
La mandarina es una fruta muy saludable, pero no sólo su pulpa, sino también su cáscara. Ésta es utilizada para combatir el insomnio y promover la relajación. De la cáscara se extrae un aceite esencial rico en limoneno que provee al organismo de estos beneficios.
Es hora de que empieces a comer con más frecuencia mandarinas. Sobre todo en la época de otoño e invierno para prevenir resfriados.