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Para la mayoría de las personas, las vacaciones decembrinas ya terminaron. Aquellos momentos de felicidad, relajación, reuniones familiares y comida ya son cosas del pasado.
Y el problema no reside en que culminaron demasiado pronto, sino lo que viene después al retomar la rutina laboral, escolar y personal, que muchas veces se torna pesado y aburrido.
De acuerdo con 24/7 Wall Street, la mayor dificultad aparece a no notar las recompensas y alegría en lo que, como trabajadores, hacemos todos los días.
“De lo contrario, el contraste entre ‘vacaciones brillantes’ y ‘vida cotidiana monótona’ puede ser desalentador si lo pensamos de esa manera”, asegura Ashley Sanford, psicóloga de Houston al portal.
Después de las fiestas y reuniones, el cuerpo parece merecer un descanso posterior para poderse recuperar y retomar las actividades.
“La resaca de las vacaciones es real”, menciona la psicóloga por lo que es imposible que el cuerpo se sienta al 100 por ciento capaz el primer día de trabajo.
Esta fase comienza a superarse después de la primea semana, al llegar el fin de semana, la energía se recarga y el cerebro está más consiente de las obligaciones.
Uno de los factores que pueden llegar a retrasar lo anterior es el exceso de trabajo o el estrés crónico, lo que desencadena pensamientos y sentimientos negativos al no poder encontrar una vía de escape.
“El agotamiento es un problema grave y puede llevar a una depresión severa e incluso suicida si no se trata” apunta la experta.
Algunas señales físicos de esta resaca son palpitaciones del corazón, problemas gastrointestinales y pérdida o ganancia excesiva de peso.
Para no experimentar estos síntomas y acelerar el proceso de readaptación a las actividades diarias después de las vacaciones navideñas, 24/7 Wall Street enlista una serie de tips que seguro te ayudarán.
En la galería te dejamos con las recomendaciones.
