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La pérdida de un ser querido, de una mascota, del trabajo o de una casa suelen ser procesos normales, e incluso naturales, pero lo difícil es lidiar con la angustia que viene después.
De acuerdo con expertos de Harvard, las pérdidas se instalan dentro de un duelo doloroso que a veces es suave y otras más tiende a ser fuerte.
Estas experiencias emocionales desencadenan efectos secundarios físicos: "la mayoría de estos efectos son el resultado de una angustia emocional”, señala la doctora Maureen Malin, psiquiatra del Hopital McLean.
Durante la etapa sensible, la función de las células inmunes y las respuestas inflamatorias aumentan cuando las personas sufren, por lo que son más propensas a enfermarse.
Por ejemplo, el estrés pone en riesgo la salud en general, debido a que el cuerpo libera más cortisol (hormona del estrés) que empeora condiciones existentes como insuficiencia cardíaca o diabetes.
A su vez, origina nuevas afecciones como presión arterial alta, acidez estomacal, insomnio y cambios en el apetito.
Los casos de estrés extremo se asocian con cambios en las células del músculo cardíaco o en los vasos sanguíneos coronarios.
Expertos nombran esta afección como cardiomiopatía o síndrome del corazón roto y sus síntomas son similares a un ataque cardíaco: dolor en el pecho y dificultad para respirar.
Por otro lado, Harvard menciona que es normal la tristeza durante el periodo de duelo, no obstante, algunas personas suelen deprimirse.
Como evidencia, 50 por ciento de las personas viudas se deprimen durante los primeros meses después de la muerte de un cónyuge. La depresión les causa aislamiento, soledad y descuido personal.
Malin señala que este lapso puede ser superado con ayuda experta, una rutina saludable como salir a caminar, hacer tres comidas diarias en porciones pequeñas aunque no haya apetito y hacer conexiones sociales con amigos, familiares y seres queridos.
Si bien el proceso es complicado, llegará el momento enn que el cuerpo y la mente se libere de todas sus penas.
En la galería te dejamos con las formas en que el duelo afecta la salud.