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La obesidad infantil es uno de los problemas más graves de salud que enfrenta Estados Unidos hoy en día, tan sólo al año afecta a más de 13.7 millones de niños y adolescentes entre las edades de 2 a 19 años, según anuncian los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de EU (CDC por sus siglas en inglés).
Si bien la cura y prevención de esta enfermedad radica en dietas balanceadas, rutinas de ejercicio y una mejor calidad de vida, tras varias investigaciones y ensayos, especialistas están apostando por métodos más efectivos que incluyen procedimientos quirúrgicos como la bariátrica o también conocida como de pérdida de peso.
Cirugía bariátrica, ¿qué es?
De acuerdo con la Academia Estadounidense de Pediatría (AAP por sus siglas en inglés), esta cirugía ayuda a reducir el peso corporal por medio de una reducción en el tamaño del estómago y con cambios en el sistema digestivo.
El método es irreversible, se aplica a niños y adolescentes de 12 a 15 años y entre los 16 a 19, con resultados positivos a largo plazo en cuanto al peso corporal se refiere y en la prevención de enfermedades como diabetes, presión arterial alta, hígado graso, apnea del sueño o problemas cardiovasculares.
Efectividad
Los especialistas dicen que la evidencia más certera sobre la efectividad se comprobó en dos grupos de pacientes durante ocho años.
El seguimiento destacó que las personas que se sometieron a dicho procedimiento redujeron su Índice de Masa Corporal (IMC) en un 29 por ciento, mientras que los que no tuvieron la operación tuvieron un aumento del IMC a 3.3 puntos en promedio.
Harvard asegura que los resultados positivos dependieron de un equipo multidisciplinario que intervinieron en las cirugías, brindaron apoyo a los pacientes y familiares, información pre y posoperatoria; además de dietistas y pediatras que dieron seguimiento al procedimiento.
¿Para quién es la cirugía bariátrica?
Según los especialistas de la AAP, los candidatos a esta operación son:
Niños con IMC mayor o igual a 35 y una o más complicaciones por obesidad.
Niños con IMC mayor o igual a 40 con o sin complicaciones.
No se recomienda el procedimiento a niños o jóvenes con problemas de abuso de sustancias mal controlados, con trastornos alimenticios y jóvenes embarazadas o con planes de embarazo.
Cuidados que deben tener las personas con cirugía
Los pacientes deben adoptar un nuevo estilo de vida cuidando lo que comen, no sólo en los primeros días del procedimiento, sino por el resto de sus vidas.
El consumo de suplementos alimenticios o vitaminas, deben ser diarios.
Harvard dice que no es un método que ponga en peligro la vida de los pacientes, si bien los pacientes toman una decisión importante al someterse a ella, es una oportunidad de mejorar la calidad de vida y asegurar una vida saludable.
