La pérdida de un ser querido puede resultar en un evento traumático. Cuando muere un confidente, un amigo o una pareja el mundo puede volverse frío o amenazante.
Expertos de la Universidad de Harvard señalan, tras varios estudios, que después de la muerte de cónyuge se corre más riesgo de morir o padecer una enfermedad cardiaca. Pero, ¿hasta qué punto el dolor es normal?
Investigadores del Instituto de Cáncer Dana Faber confirman que las personas pasan por etapas de pena-incredulidad, anhelo, ira, depresión y aceptación, pero también subrayan que el anhelo es la reacción más común.
"Hasta ahora, la gente pensaba que la tristeza era el rasgo más característico del duelo, pero los datos demuestran que se trata más de anhelo, un deseo de que regresen", dice Holly Prigerson, experta en duelo.
Llegaron a esa conclusión, luego de entrevistar a 233 personas en Connecticut. Los síntomas negativos (incredulidad, anhelo, enojo y depresión) suelen ir en declive luego de seis meses de la pérdida. Quienes enfrentan angustia más allá de ese lapso de tiempo, deben ser evaluados por un experto en salud mental.
Harvard explica que el estudio confirma la "teoría de la etapa" de la pena, descrita por John Bowlby y Colin Parkes, en la década de 1960. "Los resultados proporcionan una base de evidencia desde la cual educar a los médicos y psicólogos”.
En nuestra galería, las señales para reconocer el dolor traumático o la depresión.