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La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) aprobó un tratamiento histórico contra el cáncer: la primera terapia genética para tratar enfermedades potencialmente mortales.
El tratamiento Kymriah es para pacientes pediátricos y adultos jóvenes con una forma de leucemia linfoblástica aguda (cáncer de médula ósea y sangre).
"Estamos entrando a una nueva frontera en la innovación médica con la capacidad de reprogramar las células de un paciente para atacar un cáncer mortal", dijo el comisionado de la FDA Scott Gottlieb.
"Las nuevas tecnologías, como las terapias de genes y células, ofrecen el potencial para transformar la medicina y crear un punto de inflexión en nuestra capacidad para tratar e incluso curar enfermedades que eran intratables. En la FDA, estamos comprometidos a ayudar a acelerar el desarrollo y revisión de tratamientos innovadores que tienen el potencial de salvar vidas ", señalaron en un comunicado.
Kymriah es una inmunoterapia celular: las células T del paciente se recogen y envían a un centro de fabricación, donde se modifican genéticamente para incluir un nuevo gen que contiene una proteína específica (un receptor de antígeno quimérico o CAR).
El gen incluido ordena al sistema inmunológico matar las células leucémicas en el cuerpo del paciente.
El Instituto Estadounidense del Cáncer estima que, aproximadamente, 3 mil 100 pacientes menores de 20 años son diagnosticados con cáncer de médula ósea y sangre.
"Kymriah es un enfoque de tratamiento de primera clase que llena una importante necesidad no satisfecha para niños y adultos jóvenes con esta grave enfermedad". La eficacia del tratamiento ya fue probada: la tasa de remisión general,durante los tres meses de tratamiento fue del 83%.
Sin embargo, aún tiene el potencial de causar efectos secundarios severos. Puede provocar fiebre alta, gripe y daños neurológicos. También infecciones graves, presión arterial baja y disminución de oxígeno.
Para evaluar aún más la seguridad a largo plazo, la compañía Novartis está obligada a realizar un estudio observacional post-comercialización con pacientes tratados. El tratamiento es caro: cuesta 475 mil dólares.