Las personas que consumen niveles más altos de vitaminas y minerales también tienen menor riesgo de padecer enfermedades cardíacas, derrames cerebrales, diabetes o cáncer.
Así lo revela una investigación de la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard. “Las vitaminas y minerales son tan esenciales para vivir como el aire y el agua. No solo mantienen su cuerpo sano y funcional, sino que lo protegen de una variedad de enfermedades”.
Las vitaminas se dividen en dos: las solubles en agua y las que se almacenan en el hígado y tejidos grasos. Al primer grupo pertenecen las ocho vitaminas B (B-1, B-2, B-3, B-5, B-6, B-7, B-9 y B-12) y la vitamina C; al segundo, las vitaminas A, D, E y K.
De acuerdo con la UNAM, cada una cumple una función en el organismo; algunas actúan como intermediarios metabólicos y otras como antioxidantes.
Los minerales son igual de importantes para el cuerpo; aportan energía para regular funciones del organismo.
El 50% de estadounidenses consume vitaminas y minerales en suplementos alimenticios. Afortunadamente, no es necesario comprar esos productos porque abundan en frutas, verduras y carnes.
La vitamina A “es necesaria para la piel, las mucosas y la vista, su deficiencia causa pérdida de agudeza visual. La dosis diaria necesaria varía según la edad, sexo y etapa de la vida”. La encuentras en carne de res, hígado, huevos, camarones, pescado, leche fortificada, zanahorias, calabazas, espinacas y mangos.
Conoce el resto de las vitaminas y sus funciones en nuestra galería. Te diremos qué alimentos consumir para recargarte de ellas.