Los cigarrillos, como los conocemos hoy en día, dejarán de ser los mismos de acuerdo con un plan de la Food & Drug Administration (FDA) de Estados Unidos a fin de cambiar la trayectoria de las enfermedades relacionadas con el tabaco incluyendo la propia la muerte.
Este viernes, la agencia encargada de regular los alimentos, medicamentos y otros productos de consumo humano y veterinario, anunció que está dispuesta a acabar con la crisis de adicción a la nicotina que impera en Estados Unidos y otras partes del mundo, y principalmente en un esfuerzo para proteger mejor a los niños de caer en adicciones al futuro.
El plan consiste en reducir los niveles de nicotina en los cigarrillos a niveles no adictivos, con ello se espera “disminuir la probabilidad de que las generaciones futuras se vuelvan adictas a los cigarrillos y permitir que los fumadores actualmente adictos dejen de fumar”.
Aunque no hay una fecha determinada para poner en marcha este plan, la FDA dijo que las solicitudes para comercializar los productos combustibles que contengan tabaco se enviarían antes del 8 de agosto de 2021.
Esta regulación del tabaco aún no es definitiva ni entrará de golpe, pues de acuerdo con la FDA, se proyecta iniciar con un diálogo público sobre el plan, así como emitir un aviso anticipado de propuesta de reglamentación para buscar información sobre los posibles beneficios de salud pública y los posibles efectos adversos de la reducción de la nicotina en los cigarrillos.
Cabe destacar que la nueva política no modifica los controles obligatorios actuales para comprar y consumir tabaco tales como edad e identificaciones, por lo que las reglas sobre ventas ilegales a menores siguen vigentes y sujetos a la aplicación de la ley de la FDA.
Según la agencia, casi el 90% de los fumadores adultos comenzaron a fumar antes de los 18 años y casi 2,500 jóvenes fuman su primer cigarrillo todos los días en los Estados Unidos.