La memoria y la salud mental se van degenerando a medida de que envejecemos, pero una serie de hábitos saludables pueden prevenir el deterioro, aseguran expertos.
En primera estancia, Harvard dice que practicar <span ><strong>ejercicio aeróbico</strong></span> regularmente durante al menos 30 minutos al día y adoptar una dieta mediterránea a base de pescado, aceite de oliva, frutas, verduras y granos integrales puede ayudar.
Pero reciente evidencia demuestra que las actividades sociales y mentales llegan a tener un impacto mucho más importante en la prevención de enfermedades como la demencia y Alzheimer.
Las personas mayores que participan en actividades sociales logran tener una ‘actitud mental positiva’, aprenden cosas nuevas y mantienen sus habilidades cognitivas por más tiempo que las personas que se mantienen aisladas.
Actividades sociales beneficiosas
Las mejores actividades son las siguientes, según la Clínica Mayo:
- Actividades sociales.
- Juegos (de mesa principalmente).
- Hacer manualidades/artesanías.
- Usar la computadora.
Para sacar estas conclusiones, los expertos siguieron a 2 mil hombres y mujeres ‘cognitivamente normales’ de entre 50 a 70 años o más durante cinco años.
Al grupo de voluntarios se les pidió realizar encuestas sobre la frecuencia con la que realizan dichas actividades.
Además, hicieron exámenes neurológicos que incluyeron un historial de sus habilidades en el hogar y en la comunidad; así como pruebas neuropsicológicas de memoria, lenguaje, habilidades visoespaciales, atención y función ejecutiva.
Una vez terminado el estudio, los investigadores analizaron los datos obtenidos para ver si se mantuvieron cognitivamente normales o si desarrollaron un deterioro cognitivo leve (DCL) y de qué forma lo hicieron.
¿Desde qué edad podemos practicarlas?
Harvard dice que si queremos mantener nuestra mente sana y los recuerdos frescos en la vejez, debemos realizar actividades sociales, jugar diferentes tipos de juegos de mesa, usar computadoras y crear manualidades con frecuencia desde la edad media en adelante (entre los 50 y 65 años).
Aunado a esto, a partir de la adultez joven se recomienda hacer ejercicios físicos al menos 30 minutos al día, cinco días a la semana y adoptar una dieta saludable establecida por expertos en la materia.
Si bien las investigaciones no se centraron en aprender idiomas o hacer lecturas en una segunda lengua, según Harvard, podría contar como actividad estimulante mental si tienen algún grado de dificultad ya que el cerebro se esforzará más para comprender y recordar estructuras o palabras nuevas.