Una de las resoluciones de Año Nuevo más comunes, y más complicadas de cumplir, es bajar de peso o mantener el peso ideal controlado.
Y es que entre tanta comida rica y antojos de bocadillos dulces, este propósito suele tornarse difícil de cumplir sin importar cuántas dietas y régimenes existan para ayudarnos.
Para nuestra buena suerte, no es necesario dejar de comer alimentos y bocadillos dulces para bajar de peso, sólo es necesario sustituir los azúcares refinados, utilizados en golosinas chatarra, con azúcares naturales que normalmente se encuentran en las frutas y que son igual e incluso más ricas.
“La fruta es un elemento nutritivo para disfrutar durante un viaje de pérdida de peso como un regalo y para disminuir los antojos de otros alimentos dulces menos saludables”, dice la nutricionista Amy Shapiro a Women’s Health.
Las frutas, además de ayudar a lidiar con los antojos, nos aportan una sensación de satisfacción más larga que otros alimentos y benefician a nuestro sistema digestivo debido a sus altos niveles de fibra.
Son la base de una dieta equilibrada también por sus múltiples vitaminas y otros nutrientes que se relacionan con un peso más saludable y menor riesgo de padecer enfermedades crónicas y mortales como la diabetes, presión arterial alta, cáncer y enfermedades cardíacas.
Sin embargo, lo anterior no significa que no controlemos el consumo de frutas al día.
Según los expertos, el consumo de cualquier alimento en exceso, sin importar qué tipo de azúcares contengan, pueden frustrar nuestros objetivos de pérdida de peso.
Lo ideal es consumir dos porciones de fruta al día o tres si el cuerpo se mantiene en constante actividad y es capaz de procesarlas de forma rápida y sencilla.
Una porción es calificada como una fruta entera que quepa en la palma de la mano, como una manzana , una naranja o una taza de frutas frescas mixtas cortadas.
Las toronjas son de las frutas que más apoyan el cuidado de la salud y por consecuencia del peso. Son bajas en calorías y ricas en vitaminas A y C, cuidan el colesterol, limitan el consumo de comida chatarra, reduce la grasa corporal, la circunferencia de la cintura y la presión arterial.
Gracias a su bajo contenido de calorías y alto contenido de fibra, la manzana favorece la pérdida de peso, sacian más que otras frutas.
Se recomienda comerlas en rodajas, cubos con otras frutas o enteras que en jugo para reducir el hambre y controlar el apetito.
Las bayas como los arándanos, frambuesas, moras y fresas son una opción inteligente para perder peso, ya que llenan más que un refrigerio de alimentos procesados y tienen una menor cantidad de calorías.
Además, las bayas ayudan a disminuir los niveles de colesterol, reducir la presión arterial y disminuir la inflamación.
También conocidas como drupas, estas frutas con hueso son bajas en calorías y ricas en nutrientes como la vitamina A y C ideales para personas que desean bajar de peso.
Gracias a que aumenta la saciedad, son un buen reemplazo de las papas fritas, las galletas o cualquier otra comida chatarra.
Algunas de las frutas con hueso son los duraznos, las nectarinas, ciruelas, cerezas y albaricoques.
Catalogado más como un vegetal que como una fruta, el ruibarbo es bajo en calorías y alto en fibra. Ayuda a perder peso y a controlar los altos niveles de colesterol en la sangre.
Son ricos en nutrientes, vitamina C, vitamina E, ácido fólico y fibra. Los kiwis tienen el poder de controlar la presión arterial, reducir el tamaño de la cintura, controlar el azúcar en la sangre, mejorar el colesterol y apoyar la salud intestinal.
A parte de ser deliciosos, los melones son bajos en calorías y tienen una gran cantidad de agua, lo que los hace ideales para bajar de peso y para la hidratación.
Tan sólo una taza aporta entre 46 y 61 calorías, y altas cantidades de fibra, potasio, antioxidantes y vitamina C.
Al igual que la toronja y otros cítricos como las mandarinas y los limones, las naranjas son bajas en calorías y ricas en vitamina C y fibra.
Además, da una sensación de satisfacción más larga y reduce los antojos. Lo ideal es comerlas en rodajas o cócteles que en licuados o jugos, dicen los expertos.
Sin importar las cantidades de azúcares y calorías que tenga un solo plátano, esta fruta es rica en nutrientes como el potasio, magnesio, manganeso, fibra, antioxidantes y vitaminas A, B6 y C que ayudan a controlar los niveles de insulina y regulan el peso, en especial en personas con diabetes o con colesterol alto.
A pesar de los altos niveles de calorías y grasas, los aguacates ayudan a bajar de peso y a mantenerlo sin rebote. Esto debido a que aumenta la sensación de saciedad, disminuye el apetito y mejora los niveles de colesterol.